Llevo 2 años con este casco y ya es hora de escribir una reseña. Elegí este modelo porque quería un aspecto que fuera acorde con una moto neo-retro, incluso con una moto custom americana. Quería un casco integral y el requisito era tener un visor solar integrado.
Y tener un parasol integrado en una gama clásica, ¡pues eso hace que las opciones sean rápidamente muy limitadas! Porque una vez que superas el atractivo visual de un Bell Bullit o incluso de un Premier Trophy y todos sus competidores, tienes que admitir que puedes olvidarte del parasol. Y yo desde que probé este parasol, pues no puedo prescindir de él. Así que aquí estoy, buscando un integral con visera retráctil, con un aspecto que se vea bien en máquinas ligeramente clásicas. Así que eliminando la mayor parte del mercado (es decir, sport y GT sport), encuentro la marca americana Simpson. El modelo Venom me llama la atención por su aspecto atípico, las pruebas parecen ser bastante buenas así que bingo, aquí está el elegido de mi corazón.
Estamos ante un casco de gama media cuyo precio ronda los 350 euros. Llegados a este punto, cabe destacar que vengo de un Schuberth S1 Pro de gama alta conocido por su silencio y su calidad de fabricación. Así que me decidí por el Simpson, esperando no decepcionarme demasiado porque sé que tendré que bajar de categoría.
El casco está bien equipado, se entrega con una funda clásica pero con un bonito estampado, un Pinlock para instalar, pegatinas reflectantes para pegar si se quiere y un peto antirrobo extraíble. La primera sensación es que es más bien pequeño! Estuve a punto de devolverlo y cambiar a la talla siguiente porque las primeras caídas fueron difíciles. Pero no me dolía, así que aguanté y se acostumbró a mi cráneo después de unas horas de paseo. Ten en cuenta que suele ser así, las primeras veces con un casco nuevo no siempre son agradables, a veces incluso ligeramente dolorosas, pero es el tiempo que tardan las espumas y el forro en tomar la forma de tu cráneo. Un casco demasiado cómodo al principio puede ser demasiado grande después de unos cientos de kilómetros, indica el concesionario de motos ocasión Málaga Crestanevada.
Lo que más me sorprendió fue el peso: unos 1300 gramos frente a los 1500 gramos del Schuberth, en sí mismo no es enorme, pero se nota enseguida al cambiar entre ambos modelos. Sin embargo, esto no hace que los Simpson sean más cómodos de llevar, incluso cuando se usan durante varias horas. Entre los detalles que me han gustado, destacaría el amplio campo de visión, el peso, el aspecto, el parasol que es fácil de manejar y es suficientemente grande.
El confort general es bastante bueno, incluso en las grandes salidas de un día: no hay dolor que señalar, ni fatiga en el cuello. El casco sabe olvidarse a este nivel, pero tampoco es como una zapatilla: todo es más bien firme por dentro.
En el lado de la ventilación, se puede ver que las rejillas de ventilación están protegidas por una especie de malla metálica. Es bonito y contribuye al aspecto general, pero no hay que esperar milagros. Estoy acostumbrado a sentir un chorro de aire en la parte superior de la cabeza con el Schuberth, pero ese no es el caso aquí. Sin embargo, no pasé demasiado calor en verano, lo que demuestra que las entradas de aire son al menos eficaces. En cuanto a los ajustes, sólo se puede abrir o cerrar la ventilación de la mentonera, la que permite que el aire suba por el interior de la visera, y es mejor preverlo antes de salir porque hay dos de estas ventilaciones y el ajuste de encendido y apagado se hace desde el interior del casco. Es complicado con guantes, e imposible si el peto se instala con el casco en la cabeza.
Hablemos de este babero. Super eficiente para evitar que el aire suba al casco, pero muy difícil de instalar. Se sujeta a la carcasa con lengüetas de un plástico de baja calidad y moldeado toscamente. El resultado es que en mi casco siempre se desprende un lado del peto. No sé si es sólo en mi casco, pero es muy molesto. También respecto a este peto, el plástico muy duro y afilado me araña la frente cada vez que me pongo el casco. En fin, este pequeño detalle es muy poco y en el día a día reconozco que es doloroso. En verano, estoy contento de poder quitar este babero, pero en invierno es realmente necesario, al menos en este modelo.
Otro detalle que no me gustó fue el nivel de ruido. Viniendo del Schuberth, que es conocido por su silencio, el cambio al Simpson me hizo sentir muy extraño. Esto me hizo decidirme a dar el paso y comprar tapones especiales para motos para filtrar el ruido del viento. Un dispositivo que recomiendo encarecidamente a todos aquellos que lleven un casco ruidoso. Incluso si estoy sentado detrás del amplio carenado de mi Indian Chieftain, no recibo toda la fuerza del aire como solía hacerlo en la Guzzi, pero los remolinos parecen estar muy amplificados. A decir verdad, acabo de adquirir un casco nuevo, ya hablaré de él en otro artículo, pero es la noche y el día porque la sensibilidad a los remolinos de aire no es en absoluto la misma. Por lo tanto, el Simpson Venom es un casco ruidoso y los tapones para los oídos son una verdadera ventaja.
Al final, después de dos años de uso, ¿qué opino? Tengo que admitir que tengo sentimientos encontrados. Viniendo de un producto de gama alta, me digo que con el Simpson me sale a cuenta, es decir, es un auricular medio: ruidoso, cómodo pero no mucho más, con detalles de acabado un poco tramposos, pero muy ligero, bonito, y que parece envejecer bastante bien. Sin embargo, acabé echando de menos el alto nivel del Schuberth. Esto, unido a que ansiaba un modular, acabo de cambiar a un Shoei Neotec 2. Es mucho más pesado, pero en términos de silencio y comportamiento frente a los remolinos generados por mi burbuja, la diferencia es clara… ¡y el guardabarros del Neotec está mucho mejor diseñado! No tenemos el mismo presupuesto, ni el mismo aspecto, pero la diferencia en términos de confort y acabado es realmente evidente. Dicho esto, un casco de gama media de una marca más generalista y con más distribución podría ser mejor que el Simson para comparar. Es difícil de decir, admito que no tengo mucha experiencia con él, pero tengo la sensación de que podría haber conseguido algo mejor por 350 €.