¿Se ha mirado recientemente en el espejo y se ha dado cuenta de que la línea de las encías se está desvaneciendo y exponiendo las raíces de sus dientes? ¿Ha pasado la lengua por la parte posterior de un diente y ha sentido la superficie estriada de una raíz? Entonces tiene recesión gingival, también conocida como encías retraídas.
Esta afección es el resultado de la disminución del tejido gingival y/o la retracción del margen gingival de la corona de los dientes, señala la dentista Granada Dra. Cecilia Almagro. La retracción de las encías es bastante común en los adultos a partir de los 40 años, pero la pérdida de tejido gingival puede comenzar en los primeros años de la adolescencia y avanzar debido a una mala higiene bucal y a la enfermedad periodontal. Dicho esto, incluso aquellos que practican una buena higiene bucal pueden ser víctimas de esta afección debido a factores hereditarios (por ejemplo, la posición de los dientes y el grosor de las encías) y/o al desgaste físico que se produce al cepillarse los dientes con fuerza o al utilizar un cepillo de dientes de cerdas duras. Sea cual sea el caso, la recesión de las encías debe cortarse de raíz antes de que empeore y afecte negativamente a su aspecto, al tiempo que aumenta el riesgo de sensibilidad (a los alimentos y bebidas) y de pérdida de dientes.
Una rápida búsqueda en Internet sobre el tratamiento de la recesión de las encías descubrirá una técnica llamada injerto de encías. El nombre por sí solo incita a la inquietud, y es comprensible porque para los no iniciados, el injerto de encías no suena precisamente agradable. Existen varios procedimientos de injerto de encías. Por un lado, están los injertos de tejido conectivo, el método más común de todos, en el que se toma tejido del paladar y se sutura sobre la zona de la raíz expuesta. También están los injertos gingivales libres, que son similares a los anteriores, aunque el tejido se toma directamente del paladar. Por último, están los injertos pediculares, que se encargan del tejido adyacente al diente que necesita una reparación de la encía. Mientras que cuando se hace con el toque experto de un especialista en cirugía oral y de las encías el injerto de encías va sin problemas, hay una alternativa preferida y moderna que aliviará sus preocupaciones sobre un injerto gingival – la técnica quirúrgica pinhole (PST).
La PST es un procedimiento que implica el uso de instrumentos especializados para hacer un pequeño agujero en su encía retraída y añadir colágeno para estabilizar la zona de recesión gingival. Puede ver más sobre los detalles de la técnica aquí, pero a continuación, profundizamos en los beneficios directos de la PST.
Beneficios de la técnica quirúrgica del agujero de alfiler como alternativa al injerto de encías para tratar las encías retraídas
- Una forma mínimamente invasiva de tratar la recesión de las encías
La cirugía oral mínimamente invasiva es aquella que minimiza o elimina la necesidad de realizar incisiones quirúrgicas, lo que en última instancia reduce el traumatismo en la cavidad oral y en el paciente. Con la PST, se realiza un pequeño orificio perforando la mucosa apical a la unión mucogingival en la zona de recesión gingival. A partir de ahí, se introduce un instrumento especializado a través del «agujero de alfiler» para levantar un colgajo de espesor total en dirección apico-coronal. Una vez que el periostio se levanta del diente y el hueso subyacentes, el colágeno puede ser transportado a través del «pinhole» e insertado bajo la encía en los espacios interproximales y las superficies faciales de las raíces expuestas. No hay incisiones ni suturas en el PST, que es principalmente la razón por la que los pacientes prefieren este procedimiento sobre el injerto de encías.
- Puede tratar múltiples áreas de recesión en una sola sesión
El injerto de encías normalmente sólo puede tratar una zona de recesión gingival a la vez, lo que puede hacer que los pacientes tengan que volver a realizar varias visitas, algo que sin duda es más agotador que la alternativa. Sin embargo, con la técnica quirúrgica estenopeica, un especialista puede realizar el procedimiento en múltiples zonas de la boca en una sola visita. Eso es un gran beneficio para todos.
- Efectos secundarios mínimos y tiempo de recuperación más rápido
Al no haber incisión, los efectos secundarios comunes del injerto de encías, como el dolor, la incomodidad, la hinchazón y el sangrado, se reducen al mínimo. Además, al no haber suturas (los tejidos se mantienen en su lugar con colágeno), puede volver a disfrutar de los aperitivos y las comidas normales la noche después del procedimiento, aunque para una buena medida se recomienda que evite los alimentos duros, crujientes o demasiado masticables que pueden traumatizar el tejido de las encías durante unos tres días a una semana. Por último, gracias al uso de sólo anestesia local, es más que probable que pueda volver al trabajo al día siguiente – lo siento por esa parte.
- Mejora casi inmediata de su sonrisa
Mientras que el tratamiento de la recesión de las encías es esencial para la salud oral, la mayoría de la gente toma medidas tan pronto como las encías retraídas comienzan a afectar a su sonrisa y la apariencia general. Una vez más vemos por qué la técnica quirúrgica estenopeica es la alternativa preferida al injerto de encías. Después del procedimiento PST, la mayoría de los pacientes disfrutan de una mejora casi inmediata, significativa y de aspecto natural en su apariencia. Al cabo de una hora (más o menos) de salir de la clínica, se sentirá emocionado de hablar, sonreír y reír con sus amigos, familiares, colegas y extraños por igual.
Clínica dental Cecilia Almagro Anaya
Dirección: Calle Gustavo Doré, 2, 18015 Granada, España
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